domingo, 21 de febrero de 2016

Infarto por Cocaína

Infarto por Cocaína


De manera cada vez más frecuente nos enteramos del fallecimiento de algún personaje famoso como consecuencia del uso de drogas ilícitas. Por cada famoso debemos imaginar que existe un gran número de personas comunes que contribuyen a generar una estadística, siempre creciente, de víctimas mortales de estas sustancias. La cocaína es una de las estrellas principales dentro de las más dañinas. Algunos la utilizan como droga recreativa, otros para aumentar la capacidad productiva, pero lo cierto es que todo el que la consume está jugando la ruleta rusa, esa del revólver en la cabeza, aunque en este caso el revólver apuntaría al corazón.

La Cocaína (benzoilmetilecgonina) es un alcaloide extraído de la planta de coca. Está disponible para consumo oral, intravenoso e intranasal. La forma denominada “crack” es estable en el calor y puede ser fumada. Cuando se aplica localmente la cocaína produce un efecto analgésico debido a que inhibe la permeabilidad de la membrana celular al sodio, bloqueando el inicio y transmisión de los impulsos nerviosos. Cuando se consume ejerce sus efectos alterando a las neuronas y afectando la transmisión nerviosa. La cocaína bloquea que los neurotransmisores noradrenalina y dopamina sean recapturados luego de su liberación inicial, provocando un exceso de ellos en el sitio del receptor post-sináptico. En resumen, la cocaína actúa como un poderoso agente simpático-mimético, es decir, el que potencia y aumenta el efecto simpático.   

El uso/consumo de cocaína ocupa el segundo lugar, después de marihuana, como droga ilícita en EE.UU. Existen múltiples elementos relacionados entre esta droga y el desarrollo de isquemia e infarto del corazón, entre los cuales destacan:   
1) Incremento de la necesidad (demanda) de oxígeno, en presencia de un aporte fijo o disminuido.
2) Vasoconstricción acentuada de las arterias coronarias.
3) Aumento de la agregación plaquetaria y formación de trombo, el coágulo patológico.

La cocaína induce incremento en los tres principales determinantes del consumo miocárdico de oxígeno: frecuencia cardíaca, presión arterial y contractilidad del ventrículo izquierdo. Al mismo tiempo, la droga causa vasoconstricción de las arterias coronarias epicárdicas, lo que genera que el aporte de oxigeno disminuya incluso con a pesar del incremento en la demanda. El efecto de vasoconstricción puede ocurrir en segmentos normales o enfermos de las coronarias. Esta vasoconstricción inducida por cocaína resulta principalmente de la estimulación de los receptores alfa-adrenérgicos localizados en las coronarias, dato que hay que tener en cuenta debido algunos medicamentos de uso frecuente en el tratamiento del Infarto del Corazón, como los beta-bloqueadores, pueden empeorar la vasoconstricción. 

La droga también causa incremento en la producción endotelial de la endotelina (potente vasoconstrictor) y disminuye la producción de óxido nítrico (potente vasodilatador), efectos todos que incrementan la vasoconstricción.    

Los efectos deletéreos de la cocaína son exacerbados por el uso concomitante del cigarrillo, que también puede provocar vasoconstricción mediante estimulación alfa adrenérgica. energética. El incremento de la frecuencia cardiaca y de la presión arterial es mucho mas intenso con esta combinación que con cada uno por separado.

El dilema médico en la emergencia ocurre cuando se presenta un paciente con un cuadro clínico similar al infarto del miocardio. En el electrocardiograma se puede detectar elevación persistente del segmento ST o elevación transitoria del ST. Esto último se puede observar en vasoespasmo coronario y hace sospechar el efecto de la cocaína. Se ha estimado que aproximadamente 6% de las personas que presentan dolor torácico después del consumo de cocaína desarrollan Infarto del Miocardio. El paciente típico es un hombre alrededor de 30 años de edad con tabaquismo como principal factor de riesgo asociado. No se ha demostrado relación entre la ocurrencia del Infarto y el tiempo o la dosis de consumo. Este puede ocurrir incluso en usuarios de primera vez. El riesgo es más alto dentro de la primera hora del consumo (24 veces más alto), declinando rápidamente. Sin embargo, se han descrito casos que ocurren pocos días después, lo que se ha relacionado con el efecto de al menos 2 metabolitos mayores del alcaloide. Cuando ocurre elevación transitoria del ST los pacientes deben ser manejados inicialmente con benzodiacepinas y vasodilatadores intravenosos. Se deben evitar los beta-bloqueadores, en especial propranolol, y en caso de ser necesario su uso debido a elevación importante de la presión arterial y/o taquicardia, preferir los que poseen efecto bloqueante alfa (carvedilol). También se ha utilizado la fentolamina, bloqueante alfa, sobre todo para el control de las crisis hipertensivas generadas por la droga. Algunos autores recomiendan la asociación de nitratos y verapamil en pacientes con Infarto del miocardio relacionado a cocaína. El resto del tratamiento es similar al tratamiento convencional de los síndromes coronarios agudos.  


En un registro médico de EE.UU. que evaluó 10.085 adultos con edades entre 18 y 45 años, se determinó que el 25% de los Infartos de Miocardio fueron atribuidos al uso de cocaína. 
Qureshi AI, et al: Cocaine use and the likelihood of nonfatal myocardial infarction and stroke: Data from the Third National Health and Nutrition Examination Survey. Circulation 103:502, 2001.


Dentro de los elementos de diagnóstico, es importante destacar que la medición de la enzima CPK, un marcador de necrosis miocárdica usado comúnmente, no es confiable en pacientes con infarto relacionado con la cocaína. Cerca de la mitad de las personas que consumen cocaína tiene elevada esta enzima, lo que se ha relacionado con lesión muscular (rabdomiolisis). Por esto, cuando se sospecha de evento isquémico relacionado a la cocaína, las troponinas son las enzimas de preferencia. La cocaína tiene una vida media de 45-90 minutos, por lo que puede ser detectada en suero u orina solo algunas horas después de su uso. Los metabolitos de la cocaína, sin embargo, son detectados en sangre u orina entre 24-36 horas después del uso de la droga, por lo que pueden ser utilizados como indicadores de ingestión reciente.  
Otras complicaciones frecuentes relacionadas con la cocaína son: crisis hipertensivas, arritmias cardiacas y disección aórtica. Incluso se considera que este alcaloide es una cardiotoxina, debido a que es causa frecuente de miocarditis, una inflamación severa y peligrosa del musculo cardiaco.  

Complicaciones cardiovasculares del uso de cocaína.
Isquemia miocárdica
Angina de pecho
Infarto del miocardio
Muerte súbita
Arritmias
Edema pulmonar
Miocarditis
Endocarditis
Disección aórtica
Braunwald´s Heart Disease a Textbook of Cardiovascular Medicine. 10th edition. 2015.  


A continuación podemos observar el efecto directo de la cocaína sobre las arterias coronarias. En la primera imagen vemos un vasoespasmo severo inducido por la droga y posteriormente la respuesta a vasodilatadores durante el cateterismo cardiaco. En este caso la paciente presento paro cardiaco y falleció de complicaciones del infarto del miocardio.
(Cocaine-Induced Coronary-Artery Vasospasm.  Almaddah N, Ajayi T. N Engl J Med 2016; 374: e5February 4, 2016).  

Vasoespasmo severo
resolución de vasoespasmo luego de nitroglicerina intracoronaria







Referencias
1- Capítulo 8: Elevación transitoria del ST.  En: Carrillo E (ed): Protocolos en Cuidados Coronarios. 3era edición. 2014. 
2- Braunwald´s Heart Disease a Textbook of Cardiovascular Medicine. 10th edition. 2015.
3- Qureshi AI, et al: Cocaine use and the likelihood of nonfatal myocardial infarction and stroke: Data from the Third National Health and Nutrition Examination Survey. Circulation 103:502, 2001.
4- Almaddah N, Ajayi T: Cocaine-Induced Coronary-Artery Vasospasm.  N Engl J Med 2016; 374: e5February 4, 2016.





























sábado, 6 de febrero de 2016

Los Cinco Cuadrados

Emergencias Cardiovasculares. Abordaje de los Cinco Cuadrados.


El abordaje de los Cinco Cuadrados ha sido una herramienta conceptual utilizada por la Asociación Americana del Corazón (AHA) en la enseñanza del manejo adecuado de las Emergencias Cardiovasculares.
Consiste en una secuencia de Cinco pasos cada uno con Cuatro elementos.

Paso 1

ACLS primario o básico.
Soporte cardiovascular básico: C-ABD antiguo ABCD primario.
Compresiones torácicas-- vía aérea-- ventilación-- desfibrilación.

Paso 2

ACLS secundario o avanzado.
Soporte cardiovascular avanzado. ABCD secundario.
Manejo avanzado de vía aérea-- ventilación evaluada con dispositivos-- compresiones torácicas continuadas-- diagnostico diferencial


Paso 3

Oxigeno, acceso a vía venosa, motorización electrocardiográfica y administración de líquido.


Paso 4

Determinación de los signos vitales.
Presión arterial--  frecuencia cardíaca-- frecuencia respiratoria-- temperatura.

Paso 5

Evaluación del problema predominante de la Emergencia Cardiovascular:

  • Volumen (excesivo o inadecuado),
  • Resistencia vascular (excesiva o inadecuada),
  • Función de bomba disminuida,
  • Alteraciones de de la frecuencia cardíaca (bradicardias o taquicardias).

Fuente: ACLS Resource text 2008. American Heart Association.